Trend topics en hidratación: Hidratación y la vida activa y saludable
Jueves 11 de Septiembre 03:50 pm
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Minuto a minuto
Conclusiones
La hidratación balanceada mejora el rendimiento de todos los órganos del ser humano, desde la función cardiovascular hasta el desempeño psicológico y cognitivo, y reduce el estrés en el proceso cardiovascular mientras que la deshidratación lo aumenta. Estudios recientes demuestran que la deshidratación tiene un efecto medible en el funcionamiento cerebral, afirmó Robert Murray, gerente principal de Sports Science Insights, LLC, un grupo de consultoría que ayuda a las empresas y organizaciones que necesitan experiencia específica en ciencias del ejercicio y de la nutrición deportiva.
En la jornada inaugural de la Serie Científica Latinoamericana, el experto explicó que a pesar de que han pasado décadas de investigación al respecto, no ha sido posible establecer una norma de hidratación, porque el estado de hidratación cambia a lo largo del día y de un día a otro. Además que sabiendo científicamente que los cambios fisiológicos normales en el organismo o que los antecedentes genéticos afectan la tasa de sudoración, llegamos a la conclusión que las personas requerimos niveles de líquidos muy diferentes entre sí.
No obstante Murray detalló que existen pequeños indicadores para saber cómo y cuánto es lo que necesitamos hidratarnos, por ejemplo, la sensación de sed o el color de la orina, en dónde un tono oscuro es indicativo de falta de líquidos.
Aunque gracias a la tecnología con la que contamos hoy día, algunas firmas han desarrollado aplicaciones (apps) para teléfonos inteligentes que son capaces de medir la necesidad de hidratación de manera personalizada.
El doctor Murray contó que en enero de 2007, una mujer en California trató de ganar un concurso que consistió en tomar la mayor cantidad de agua sin ir al baño. El premio: una consola de videojuegos. En cuestión de horas, la mujer ingirió varios litros de agua para lograr ganar el reto. Horas después, de regreso a casa, la mujer empezó a tener dolores de cabeza pero no le prestó demasiada atención. Por la tarde la mujer falleció a consecuencia del exceso de agua que había tomado y que le afectó el funcionamiento cerebral.
A veces, la gente toma mucha agua antes, durante y después creyendo que están haciendo algo extremadamente saludable, explicó, aunque los casos son aislados (como la mujer de California) se han dado casos de muerte por beber en exceso litros de agua, algo conocido como hiperhidratación.
El macabro ejemplo anterior sirvió para que el Dr. Robert Murray pudiera demostrar que tanto la hiperhidratación como la deshidratación pueden afectar el funcionamiento regular de casi todos los órganos del ser humano.
“Si queremos que la gente tenga éxito en su vida diaria pero sobretodo en las rutinas de actividad física (tema de esta Serie Científica Latinoamérica), tenemos que asegurarnos que se hidraten” explicó el Dr. Murray y puntualizó: “Sabemos que estar deshidratado nos impide sentirnos bien. También sabemos que la hidratación es importante durante la actividad física, a lo largo del día o cuándo nos enfermamos. Luego entonces: ¿Porqué no prescribir la hidratación como parte de un tratamiento de vida saludable?”
Después de todo, los humanos somos unas bolsas de agua. Agua que perdemos a lo largo del día y de forma continua.
Los valores actuales de recomendación de hidratación es de 2.7 litros de agua al día para mujeres y 3.7 litros de agua al día para hombres. Aunque sería importante mencionar que una ingesta de agua un poco debajo por los litros recomendados no implica un riesgo de muerte.
Pero, así como la hiperhidratación excesiva puede ocasionar el fallecimiento de una persona, lo mismo pasa con los casos de deshidratación extrema. Murray recordó aquel verano en Chicago de 1995 dónde se experimentó un periodo inusual de calor (varios días por arriba de los 40 grados centígrados), y en dónde se registraron varias muertes ocasionadas por una combinación de deshidratación, golpe de calor e insuficiencia cardiaca.